En una Cámara de Diputados dividida, Por Santa Cruz necesitará las manos de Unión por la Patria para aprobar modificaciones prometidas en campaña. La Ley de Lemas, la nueva coparticipación y ¿la reforma constitucional para eliminar la relección indefinida?
A diferencia de Alicia Kirchner, Claudio Vidal asumirá a la gobernación y lo esperará en principio una notoria división de fuerzas políticas en la Cámara de Diputados de Santa Cruz. Alicia fue acompañada durante sus ocho años de gestión por legisladores que le respondieron incondicionalmente y la separación del bloque Somos Energía para Renovar (SER) del oficialismo no afectó su influencia en lo más mínimo. Vidal llega en otro contexto. Diciembre será un mes de estrés para muchos en Economía.
Apenas se haga carga del Poder Ejecutivo, deberá abonar la segunda cuota del Sueldo Anual Complementario a todos los empleados públicos. A los días, pagará las jubilaciones, pensiones y retiros (por Ley quedó fijado el día 24 de cada mes) y una semana más tarde los salarios de los activos. A esto se suma que, en teoría, Alicia Kirchner debería promulgar, antes del 10 de diciembre, la derogación del aporte solidario, lo que significa menos ingresos para las arcas públicas.
Al pasar el último mes del año, recién se empezarán a ver, con mayor claridad, los movimientos del nuevo gobierno. Para los cambios que prometió en campaña electoral, como la derogación de la Ley de Lemas, el controversial sistema electoral que rige desde 1989 y tuvo una serie de modificaciones en estos años, el todavía diputado nacional tiene que conseguir las manos necesarias. Para este punto en particular, todo parece indicar que no sería un problema mayor: el agobio que generó la Ley de Lemas en las últimas elecciones, principalmente en las municipales, fue transversal. El exgobernador y diputado por Distrito electo, Daniel Peralta, ya avisó que la va a acompañar.
Aunque quedó en el olvido, Vidal también aseguró que eliminará la reelección indefinida, creada por Néstor Kirchner en 1998 tras una consulta popular (allí también se implementó la figura del diputado por Municipio y la creación del Consejo de la Magistratura). Aquí los mecanismos no son tan sencillos: tiene que reformar la Constitución Provincial. “Para hacerlo tiene que haber una Ley en la Cámara de Diputados aprobada por las dos terceras partes de sus miembros que establezca la necesidad de la reforma y esos puntos a modificarse. Posteriormente, se tiene que hacer la elección de los convencionales constituyentes, que son la misma cantidad que los diputados y electos por el mismo mecanismo. A partir de ahí, empiezan a trabajar sobre la reforma”, aportó un abogado vinculado al mundo político a TiempoSur.
La nueva Ley de Coparticipación es una de las grandes deudas que deja el actual Gobierno. Anunciada hasta el cansancio, su modificación nunca se terminó de acordar entre todos los actores que convergen y la tarea se traslada a Por Santa Cruz que, según los puntos publicados en campaña, trabajará para buscar la “autonomía” de los municipios y comisiones de Fomento. “La distribución de la riqueza entre Provincia, municipios y comisionados de fomento debería efectuarse en relación directa a las competencias, servicios y funciones de cada una de ellas, de manera automática, y teniendo como objetivo siempre la equidad, solidaridad, el desarrollo, la calidad de vida e igualdad de oportunidades de todos sus habitantes. Pero, sabemos que el kirchnerismo no se basa en criterios lógicos de reparto, los mueven otros objetivos menos santos y justos. Por eso es que no se discute una ley de coparticipación, ni se discute una mejor manera de distribuir la riqueza en la provincia”, dijo en una carta, mediante sus redes sociales, Claudio Vidal.
Con estas prioridades en lo político para los próximos años (sus tratamientos no serán inmediatos), el vicegobernador electo Fabián Leguizamón presidirá una Legislatura dividida. Pese a la derrota, Unión por la Patria tendrá 12 diputados. Por distrito, ingresaron Agostina Mora, Carlos Santi y Karina Nieto, que acompañaban a Pablo Grasso en su candidatura. Y también Rocío García y Daniel Peralta, por el lado de Javier Belloni. Mora es actualmente ministra de Igualdad e Integración y fue vista como una expresión de Alicia Kirchner en la lista. Ocupó cargos en el Gobierno nacional bajo el ala de Cecilia Velázquez y luego en la provincia, hasta llegar a encabezar el Ministerio. No tiene experiencia legislativa.
Carlos Santi y Karina Nieto ya tienen el roce que da el ejercicio parlamentario. Santi es un dirigente de Puerto Deseado que está en el poder local hace tiempo. Algunos en el oficialismo ya desconfían de sus puentes con Vidal. Nieto representa a Río Turbio y es cercana al intendente Darío Menna. Rocío García renovó por cuatro años más su banca en la Legislatura y no ha tenido un rol activo en los últimos meses. Se especulaba con su candidatura a intendenta de Río Gallegos, algo que finalmente no ocurrió y tampoco hubo gente de su espacio trabajando para algún nombre de UP. Peralta preside en la actualidad YCRT y su recorrido político es de público conocimiento. Pocos se animan a vaticinar cómo será el comportamiento de los principales diputados de UP. Si tomarán la bandera opositora y marcarán una diferencia sustancial, o si serán garantes de gobernabilidad de Claudio Vidal.
Por Municipio, secundando a Grasso, ingresaron Eloy Echazú, José Bodlovic, Elba Ponce, Cristian Ojeda y Fernando Pérez. Echazú acompaña al Intendente de Río Gallegos hace tiempo y es su máxima expresión en el Poder Legislativo. Bodlovic, eterno diputado, tiene vida propia, aunque se inclinó por Grasso en el último tiempo. Viene de sufrir un revés que todavía no digieren: Analía Farías le arrebató la Municipalidad a su hijo Federico luego de más de 20 años del mismo apellido en el poder. Ponce se adhirió a la figura de Grasso en su rol provincial, al igual que Ojeda (hombre de Mauro Casarini, intendente de Perito Moreno hasta el 10 de diciembre) y Pérez (lo colocó allí Julio Bellomo, que también perdió la intendencia de Los Antiguos). Grasso ya tiene ademanes claros: quiere conducir a la oposición en la etapa que llega. Belloni, propio, tendrá a Carlos Alegría, de El Calafate. Por su espacio también ingresó Carlos Godoy, de Río Turbio.
Por Santa Cruz consiguió el ingreso de 11 legisladores propios. El nuevo frente electoral que cambió el esquema político de la provincia metió por Distrito a Fernando Españón, Iris Rasgido, Pedro Valenzuela y Claudia Barrientos. Españón fue electo intendente de 28 de Noviembre en 2019 y fue el primer jefe comunal de SER. Tras cuatro años repletos de polémica, conflictos y desgaste, Españón perdió la intendencia con Aldo Aravena de UP, pero al menos le queda su banca en Diputados. Rasgido fue vicepresidenta del Consejo Provincial de Educación en tiempos de Peralta y es una de las referentes de Vidal en Educación en zona norte. Valenzuela fue diputado de Cambiemos por dos años en reemplazo de Roxana Reyes, que había asumido en 2017 en el Congreso Nacional. Formada en Pico Truncado e integrante de Libres del Sur, Barrientos es coordinadora provincial de MuMaLa (Mujeres de la Matria Latinoamericana).
El ex Frente de Todos sufrió la pérdida de varias diputaciones por Municipio, a lo que luego se sumó la derrota de municipios claves e inesperados –Por Santa Cruz se apropió de 10 de 15–. Víctor Chamorro, que fue concejal de Caleta Olivia, se quedó con ese lugar y responde a Vidal. También el concejal de Pico Truncado José Luis Quiroga, de SER. Javier Jara se impuso en su momento en Las Heras. Jara responde a José María y Antonio Carambia. El radical de Puerto Deseado, Santiago Aberastain, se acercó a Vidal en el último tiempo y lo representará en la Cámara. Al igual que Fernando Martínez, de Gobernador Gregores, siempre volcado al sector privado y que llegó a SER por el exgobernador Sergio Acevedo. Piero Boffi es delfín del intendente Daniel Gardonio y ganó caminando en Puerto San Julián. Juan Manuel Bórquez ratificó su victoria de agosto: fue electo intendente el 22 de octubre de Puerto Santa Cruz. Por Cambia Santa Cruz estará el concejal de Río Gallegos Pedro Muñoz, quien será clave para algunas definiciones. ¿Para dónde se inclinará?
Así, con el reparto de las alianzas en la Cámara de Diputados, regresa un mecanismo de negociación que se había perdido por la abrumadora mayoría histórica del peronismo: el toma y daca. Para la búsqueda de consenso se vendrá a futuro, Por Santa Cruz necesitará tanto de Unión por la Patria como de Muñoz. Grasso ya lo dijo arriba del escenario montado sobre la avenida Kirchner el 22 de octubre a la noche: “Acá tiene un intendente para sentarse a hablar, gobernador electo. Basta de agravios”. Lo hizo porque su nombre y apellido ha sido el centro de la narrativa antikirchnerista de varios dirigentes del espacio que va a conducir la provincia desde el 10 de diciembre, entre ellos el propio Claudio Vidal. Con las reformas a la vista, ¿seguirá esta disputa mediática o mutará a un trato más amable?
TiempoSur Digital