La secretaria de Estado de Minería de Santa Cruz, Nadia Ricci, afirmó que las expectativas de grandes inversiones mineras bajo el nuevo Régimen de Grandes Inversiones son limitadas. Ricci aclaró que «no podemos esperar grandes inversiones mineras con el RIGI», ya que las inversiones significativas en minería ya se han realizado en la provincia.
Las declaraciones de Nadia Ricci, secretaria de Estado de Minería de Santa Cruz, revelaron un panorama mixto respecto a las expectativas de inversión bajo el nuevo Régimen de Incentivo a la Inversión (RIGI).
Ricci explicó que «la ley de inversiones mineras de los 90 estaba específicamente dirigida a la actividad minera, mientras que el Rigi está dirigido a todas las actividades y a las grandes inversiones en cualquier área de las industrias». Este enfoque más amplio podría atraer nuevas inversiones en diversas industrias y, eventualmente, en minería, pero Ricci subrayó que en el corto plazo no se anticipan grandes inversiones en este sector.
Respecto a los desafíos que enfrenta Santa Cruz en términos de control de inversiones para la exploración minera, Ricci fue contundente: «Tuvimos una desidia importante durante muchos años en cuanto al control de las inversiones para exploración». Esta falta de seguimiento ha generado una «brecha importante en nuevos descubrimientos», lo que hace necesario encontrar un régimen específico para atraer pequeñas inversiones en exploración, un aspecto en el que están trabajando en alianza con el Banco Santa Cruz y otras entidades.
La secretaria también comparó la situación actual de la minería en Santa Cruz con la de los años 90 y 2000, cuando la provincia fue «elegida por el aumento en el valor del oro y la plata». Aunque estos minerales siguen siendo importantes, la atención se ha desplazado hacia minerales críticos y estratégicos como el litio y el cobre. Sin embargo, Ricci advirtió que «estos proyectos aún no se han desarrollado completamente» y que el Rigi podría ser clave para impulsar estos desarrollos.
Finalmente, Ricci destacó la necesidad de que la provincia de Santa Cruz se vuelva a poner «en la vidriera» para atraer inversiones, especialmente en un contexto donde otras provincias ya han aprobado el Rigi y están comenzando a recibir nuevas inversiones. «Hoy la realidad de la provincia de Santa Cruz es que si no ponemos el pie en el acelerador, vamos a quedar rezagados», concluyó.
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