Cuáles trabajos ejecutará la gestión Vidal para el año que viene, qué entidades manejarán los fondos y cómo han sido las valoraciones de los intendentes por la distribución de los recursos.
El Presupuesto 2025 de la provincia de Santa Cruz incluye un Plan de Obras Públicas que proyecta la ejecución de trabajos por $47.913 millones, lo que representa un incremento de aproximadamente $7.500 millones respecto a los $40.687 millones asignados en el presupuesto 2024.
Este aumento, en principio, refleja la intención de dar continuidad a proyectos en curso y abordar demandas de infraestructura esenciales en toda la provincia. Aunque el presupuesto general también se incrementó significativamente, pasando de $1.347.065.197.075 en 2024 a $2.438.277.867.738, el Plan de Obras Públicas se mantiene en una escala similar al año anterior, sin grandes novedades ni expansión a nuevos proyectos de gran envergadura, lo que también da una pauta de los desafíos que enfrentará la gestión de Claudio Vidal en términos de equidad distributiva y capacidad de ejecución, especialmente a la luz de un déficit estimado en $27.697 millones, que será cubierto mediante financiamiento externo y readecuaciones presupuestarias, según lo establecido en el proyecto que entró la semana pasada a la Legislatura para su aprobación.
En este marco, el Plan de Obras 2025 incluye un total de 153 trabajos distribuidos entre proyectos de infraestructura vial, vivienda, salud, educación y servicios básicos. El Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda (IDUV) concentra la mayor parte de las asignaciones, principalmente en la construcción de viviendas y urbanización de barrios, mientras que otras dependencias, como Vialidad Provincial y el Ministerio de Salud, también tienen un papel destacado, pero en menor escala.
Vivienda, el eje principal
Entre las obras más importantes, la cuestión habitacional recibe las mayores asignaciones. Por ejemplo, hay un presupuesto de $1.428 millones por localidad para infraestructura de los planes vivienda en Río Gallegos, Las Heras, Pico Truncado, Puerto Deseado, Piedra Buena y Puerto San Julián, a lo que se suman otros montos específicos para cada municipio, lo que marca necesidad de mantener cierta continuidad de una política habitacional, que busca atender el déficit acumulado en la provincia, priorizando áreas urbanas con mayor densidad poblacional.
En ese ámbito, se destacan los $15.709.144.332 destinados para la Infraestructura para Plan de 56 Viviendas en Caleta Olivia, y que resulta, de lejos, la inversión más elevada para la obra pública provincial del 2025.
En infraestructura vial, las obras principales incluyen la repavimentación y ensanchamiento de la Ruta Provincial N°43, con un presupuesto de $476 millones, y el enripiado en Lago Posadas, que alcanza $659 millones. También se prevén trabajos menores en rutas provinciales, caminos rurales y accesos urbanos en localidades como 28 de Noviembre, El Calafate y Río Turbio. Estas obras buscan mejorar la conectividad interna y facilitar el transporte de bienes y personas, aunque muchas son continuaciones de proyectos iniciados en 2024, lo que limita la incorporación de nuevas rutas estratégicas.
El presupuesto para servicios básicos incluye ampliaciones hospitalarias, con hospitales modulares en Río Gallegos y 28 de Noviembre que suman más de $113 millones en asignaciones. Asimismo, se proyectan obras en el sector educativo, como la construcción de escuelas en Gobernador Gregores y la ampliación de aulas en Río Turbio.
Consideraciones de los intendentes
A pesar del alcance de estos proyectos, y como ha venido sucediendo desde que inició la gestión de Claudio Vidal frente a la Gobernación, la cuestión de la obra pública viene generando tensiones con los intendentes de distintas localidades. Con Pablo Grasso, intendente de Río Gallegos, siendo uno de los principales críticos del accionar de Ejecutivo con las localidades.
Es que el capitalino le ha reprochado al Gobernador la falta de avances en proyectos financiados con fondos provinciales, señalando irregularidades en gestiones anteriores y cuestionando la transparencia en la administración de los recursos asignados a su ciudad, siendo uno de los últimos episodios destacados el reclamo por el nuevo esquema de la coparticipación, que perjudica a la comuna.
Aunque Río Gallegos es la localidad más beneficiada en términos presupuestarios, las críticas de Grasso apuntan a los problemas de ejecución y supervisión que podrían comprometer el impacto de las obras.
En contraste, Pablo Carrizo, intendente de Caleta Olivia y alineado al oficialismo provincial, destacó avances significativos gracias a los acuerdos alcanzados con el gobernador Claudio Vidal. Entre los proyectos destacados se encuentran la Costanera y la doble vía Comodoro-Caleta Olivia, ambos considerados estratégicos para el desarrollo local.
El jefe comunal de la segunda ciudad más grande de la jurisdicción austral subrayó la importancia de estas obras para la integración regional y la generación de empleo, aunque reconoció que algunos proyectos menores aún enfrentan retrasos por cuestiones administrativas.
Asimismo, en localidades más pequeñas los intendentes en algún punto expresaron preocupaciones sobre la distribución desigual de los fondos, ya que las asignaciones son limitadas en comparación con ciudades más grandes, dependen de proyectos menores de infraestructura básica para mejorar sus condiciones de vida.
Líderes como Juan Martínez en Puerto Deseado y Pablo Anabalón en Pico Truncado enfatizaron la necesidad de proyectos más equitativos. En localidades como Gobernador Gregores, los fondos asignados son significativamente menores, lo que genera tensiones sobre el acceso a servicios básicos y oportunidades de desarrollo. A pesar de esto, los intendentes mantienen una postura de respaldo a las gestiones de Vidal en busca de mayores recursos nacionales.
En comparación con el presupuesto 2024, dentro del Plan de Obras del 2025 se observa un enfoque en consolidar y finalizar obras previamente iniciadas, lo que responde tanto a restricciones presupuestarias como a la necesidad de maximizar el uso de recursos disponibles. Este perfil conservador está alineado con las tendencias observadas a nivel nacional, donde las limitaciones económicas recogieron el margen para emprender grandes iniciativas de infraestructura.
El Plan de Obras Públicas 2025 representa un esfuerzo significativo por mantener y ampliar la infraestructura en Santa Cruz, aunque las tensiones políticas y los desafíos de ejecución subrayan la importancia de una gestión eficiente y equitativa. Con un total de 153 obras proyectadas y un presupuesto de $47.913 millones, el éxito del plan dependerá de su capacidad para responder a las demandas locales y superar los obstáculos que han limitado su impacto en años anteriores.
La Tecla Patagonia